La cifra oscura

Colecto los cascos de vidrio del colectivo.
El colectivo que explotó en el camino que iba a llevarme a un pasado que nunca tuve y
un pasado que siempre quise tener; uno de risas fugaces, bandas fuertes y jardines heredados
Vago por conversaciones mal recordadas, encuentros amputados por la falta de ganas y malentendidos y pauso en la idea de la relatividad personal sólo para continuar después en la cueva de mi vibrante cerebro
Quizás se me van a quitar los nervios de a poco, sintiendo menos, siguiendo en lo mismo y lo mismo es la cifra oscura de la cual conozco solamente la forma


Un depósito de mentiras que se burlan una sobre la otra, voces de fuerza mitológica que la gente no quiere escuchar más
Ahora me muevo más como el carácter de una telenovela, acumulando episodios 
Aunque siempre quise dar la bienvenida al caos 
Lo único que entendí en las clases de matemática es que todo es una aproximación 
Igual demandan que empezamos mil cosas y que sólo tiene valor lo que completamos 
El típico eslogan publicitario de los seguros es que el camino es la meta 
pero ya sabemos que es una consolación débil
Y yo: No encuentro más la parada del colectivo ya que no sé cual tomar o adonde.
Lo único que me queda es el momento. Quedarme moviendo.